martes, 5 de septiembre de 2017

Ese Kafka que anda por ahí

En 2008, la editorial Losada cumplió 70 años desde que fue fundada el 18 de agosto de 1938 en Buenos Aires por el madrileño de origen gallego Gozalo Losada (1894-1981), que había dejado la dirección de la sucursal de Espasa-Calpe Argentina S.A. para iniciar en solitario la aventura de editar. Para conmemorar la efeméride los actuales dueños crearon la Colección Aniversario en la que desde entonces y hasta ahora han venido publicando en bolsillo clásicos como Confusión de sentimientos de Stefan Zweig, Billy Budd, marinero de Herman Melville, Corazón de perro de Mijaíl Bulgakov, El baile de Irène Némirovsky o —y aquí quería yo llegar— La metamorfosis y otros cuentos (Die Verwandlung,1915; 1ª edición en esta colección: 2010) de Franz Kafka, con traducción y prólogo de Jorge Luis Borges. Parece que algunos (los que hacen y deshacen) todavía no se han enterado que Borges nunca tradujo La metamorfosis, a pesar de ser una de las versiones en español más difundidas de la obra de Kafka. No dudo de que Borges sea la alegría de la huerta editorial, pero no todo es Borges ahí fuera. Quién destapó el asunto fue el escritor y crítico literario Fernando Sorrentino en un artículo titulado El kafkiano caso de la Verwandlung que Borges jamás tradujo, publicado en Espéculo: Revista de Estudios Literarios, nº10, 1998-1999. Sorrentino había comprado el libro con la traducción de Borges en 1962; era la cuarta edición del texto publicado por Losada en 1938. Después de la primera lectura, hubo una segunda, una tercera, y a medida que fue acumulando años y más lecturas decidió un día hacer público su descubrimiento: "En primer lugar, la simple lectura me indicaba dos cosas: 1) la traducción no pertenecía a Borges, y 2) tampoco pertenecía a ningún traductor argentino: había una importante cantidad de rasgos que la ubicaban como perteneciente a un traductor español, y de gustos quizás un poco anticuados. Por ejemplo: Uso de pronombres enclíticos: encontróse hallábase; sentíase; infundióle; díjose".




En 1974, cuando Sorrentino tuvo la oportunidad de entrevistar al autor de Historia universal de la infamia para el libro Siete conversaciones con Borges (El Ateneo, 1996) no quiso desaprovechar la ocasión para preguntarle sobre el asunto que más le interesaba en ese momento. "Me pareció notar en su versión de La metamorfosis de Kafka que difiere de su estilo habitual", comentó Sorrentino como si fuera la cosa más natural del mundo. A lo que Borges respondió: "Bueno: ello se debe al hecho de que yo no soy el autor de la traducción de ese texto. Y una prueba de ello, además de mi palabra, es que yo conozco algo de alemán, sé que la obra se titula Die Verwandlung y no Die Metamorphose, y sé que hubiera debido traducirse como La transformación. Esa traducción ha de ser —me parece por algunos giros— de algún traductor español. Lo que yo sí traduje fueron los otros cuentos de Kafka que están en el mismo volumen publicado por la editorial Losada. Pero, para simplificar —quizá por razones meramente tipográficas—,  se prefirió atribuirme a mí la traducción de todo el volumen, y se usó una traducción acaso anónima que anda por ahí". En época más reciente, Sorrentino descubrió que tampoco "los otros cuentos" —reeditados por Losada en la Colección Aniversario con el título Relatos completos I (2009)— fueron traducidos por Borges, sino que, al igual que La metamorfosis, aparecieron publicados por primera vez en la Revista de Occidente, dirigida por José Ortega y Gasset, sin mención del traductor, en el número XXIV, págs. 273-306, 1925 (La metamorfosis, 1ª parte); número XXV, págs. 33-79, 1925 (La metamorfosis, 2ª parte); número XXV, págs. 204-219, 1927 (Un artista del hambre); número CXIII, págs. 209-213, 1932 (Un artista del trapecio). Esa no se la esperaban, ¿eh? La verdad, yo tampoco me lo esperaba. Éstas cosas son un bajón, lo sé. Pero siempre nos quedará Orlando de Virginia Woolf, en la traducción de Jorge Luis Borges —por encargo de Victoria Ocampo, directora de la editorial Sur—, publicada en 1937, nueve años después de la primera edición inglesa.